Tag Archives: movilización

Gerardo Fernández Casanova: Trabajadores petroleros

“Que el fraude electoral jamás se olvide”

Conforme a lo trazado en la estrategia, se cumplen las etapas de la
lucha en defensa del patrimonio nacional en materia de petróleo. Este
pasado domingo se concluyó con el proceso de la consulta pública,
mediante el cual más de dos y medio millones de mexicanos se
manifestaron en rechazo a las iniciativas de reforma de PEMEX
presentada por el gobierno espurio y, en por añadidura y en lo
conducente, a la formulada por el PRI de Beltrones. El comité
ciudadano que elaboró la propuesta alternativa por encargo del
Gobierno Legítimo y del FAP hizo su entrega formal y ya los senadores
del FAP la presentaron para su inclusión en las discusiones de las
comisiones senatoriales correspondientes. Todo está listo para que el
próximo domingo, en todas las plazas centrales de las capitales de los
estados y en la Plaza de la República del Distrito Federal, se
realicen las asambleas informativas del Movimiento Nacional en Defensa
del Petróleo, con lo que se mostrará que la determinación popular es
llegar hasta las últimas consecuencias para evitar la entrega de los
recursos naturales a la explotación por particulares y para asegurar
un operación energética congruente con los intereses de la Nación. El
caldero está, pues, en su punto.

Vale la pena detenerse a comentar respecto de la propuesta alternativa
que se entregó al Senado. En lo sustantivo, el conjunto de
modificaciones legales que se proponen (para el caso y por mandato
popular, se exigen) cierra cualquier resquicio por el que pudiera
pretenderse una privatización en toda la cadena que constituye la
industria petrolera; otorga a PEMEX las condiciones de autonomía
presupuestaria requeridas para su cabal desenvolvimiento, sin caer en
la trampa de la autonomía de gestión sino plenamente controlada por el
estado; prioriza la función detonadora del desarrollo industrial
endógeno otorgando preferencia a la ingeniería y a la provisión de
insumos, equipos y servicios de origen nacional; establece
disposiciones legales para asegurar el fortalecimiento del Instituto
Mexicano del Petróleo y de todos los organismos con capacidad de
desarrollo científico y tecnológico nacionales, evitando la perniciosa
costumbre que privilegió al extranjero; modifica la legislación
relativa a los derechos sobre la renta y los ingresos petroleros, en
términos de darle mayor transparencia y para permitir a la paraestatal
disponer de recursos de inversión para hacer frente a las necesidades
de su desarrollo y mantenimiento, incluidas las refinerías, los ductos
y las petroquímicas; ofrece los elementos legales necesarios para
combatir la corrupción y para asegurar una correcta rendición de
cuentas; aporta al diseño operativo del Consejo de Administración para
agilizar la toma de decisiones y profesionalizarlas. En resumen, la
iniciativa genera un verdadero fortalecimiento de la capacidad del
estado para conducir con eficacia y eficiencia el aprovechamiento del
recurso natural petrolero y ofrece la garantía de la seguridad
energética del país.

Hay sólo un punto en que la propuesta alternativa me parece
incorrecta. Me refiero al tratamiento de la participación de los
trabajadores petroleros en el Consejo de Administración. En la
actualidad los trabajadores participan en el órgano de dirección con
cinco representantes del Sindicato de Trabajadores Petroleros, cosa
que las propuestas de Calderón y de Beltrones dejan sin cambio. La
propuesta alternativa reduce a dos el número de representantes y lo
somete a elección libre y secreta por la totalidad de los
trabajadores, sin intervención de la directiva sindical. Voy a
argumentar:

1.- Lázaro Cárdenas merece toda la gratitud del pueblo de México por
la gesta de la expropiación petrolera, pero esta no hubiera sido
posible sin la intervención de los trabajadores, primero por su toma
de conciencia y la movilización de su fuerza (ni remotamente
comparable con los actuales sindicatos) que determinó las huelgas por
cuyas exigencias se dio el laudo de la Suprema Corte, el que condenó a
las petroleras transnacionales a cumplir las condiciones reclamadas
por los trabajadores, lo que constituyó el argumento básico para la
expropiación; segundo, por la entrega y la capacidad de los petroleros
mexicanos para mantener la industria en operación, aún con el boicot
decretado por las empresas y los gobiernos de sus respectivos países,
en oposición a la medida reivindicatoria. En México, junto a los
monumentos con la estatua de Lázaro Cárdenas, debiéramos tener
monumentos al petrolero desconocido. Esto generó un derecho histórico
insoslayable, menos aún para una propuesta formulada desde posiciones
de izquierda.

2.- El hecho incuestionable de que el Sindicato Petrolero ha devenido
en un organismo contrario a los intereses de los verdaderos
trabajadores y de la Nación, por causa de la corrupción de su
dirigencia, no justifica que se atente contra la vigencia del sistema
sindical. Si la representación ante el consejo se elige por fuera del
órgano sindical, se atenta contra su integridad. Es como si para curar
un mal se receten medicamentos que lo curen, pero que también maten al
paciente. La solución, por el contrario, es proveer a la movilización
de los trabajadores de base al efecto de que depuren su dirigencia y
puedan ejercer un sindicalismo honesto. Me queda claro que una de las
facetas de la corrupción de la actual dirigencia sindical es la que le
facilita al régimen del fraude electoral su intento privatizador. El
fortalecimiento del sindicato y su depuración serán siempre un
baluarte en la defensa del patrimonio nacional.

Dicho lo anterior, vámonos con todo en la defensa del petróleo. Nos
vemos el domingo en la plaza.

Leave a comment

Filed under Blogroll

Claudia Sheimbaum: Qué sigue después de la Consulta Ciudadana?

* Entrevista a la secretaria de secretaria de Patrimonio Nacional y coordinadora del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, Claudia Sheinbaum Pardo

La semana pasada, entre otras actividades, se nombró una comisión por parte del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, para definir el plan de acción que vamos a lleva a cabo. En esta comisión estamos Alejandra Barrales, Ricardo Ruiz, Jesusa Rodríguez y su servidora.

Queremos informarles como parte de este nuevo periodo, de esta nueva etapa, como parte del plan de acción, estamos planteando una parte que ustedes ya conocen, que es el apoyo a la consulta ciudadana que se realizará los próximos 10 y 24.

Vamos a continuar con estas actividades, saben que la consulta está apoyada por el Movimiento, por los partidos del Frente Amplio Progresista, y que está organizada por un consejo ciudadano y la observancia de Alianza y Propuesta Cívica.

La segunda es, también ustedes ya la conocen, pero vale la pena comentarla, es la propuesta que se va a presentar por parte del Frente Amplio Progresista al Congreso de la Unión, que se decidió que la preparara el grupo de expertos que participó en los foros de debate y el grupo de intelectuales en defensa del petróleo, que ya la están elaborando y en el momento en que esté lista, será presentada al Congreso de la Unión.

Y, la tercera, estamos llamando a una movilización nacional en todos los estados de la República, en todas las capitales de la República, el próximo 31 de agosto. En el Distrito Federal será en el Monumento a la Revolución y en todas las capitales habrá movilización de todos los brigadistas.

Esta es con el objetivo de estar alertas a cualquier albazo y a cualquier aprobación que pretenda la privatización del petróleo.

Hay otras actividades, que las iremos mencionando, pero estás son actividades que hemos decidido.

P: ¿En qué van a consistir estas movilizaciones?
R: Son mítines en las plazas principales de todo el país, con los brigadistas. Ustedes saben que al menos tenemos 200 mil brigadistas en defensa del petróleo en todo el país y este será el mecanismo de organización de esta movilización.
P: ¿En todo caso se les llamaría a movilizarse…?
R: En ese momento es para estar alerta y de acuerdo como se vayan dando las circunstancias, si quieren aprobar una propuesta –independientemente de la propuesta que haya presentado el grupo de intelectuales— que sea privatizadora, entonces haremos otro tipo de movilizaciones.

P: ¿Se están preparando, quizá sea muy fuerte decir, para la guerra, pero parece ser que es eminente una confrontación o un enfrentamiento entre quienes promueven la iniciativa privatizadora y no?
R: Ojalá y no se así, ojalá se abra la puerta a esta otra visión, que se está planteando, que es una visión que ya se demostró en la consulta ciudadana del pasado 27 de julio, en donde votaron en las nueve entidades de la República alrededor de un millón de ciudadanos y en el Distrito Federal 820 mil.

Es contundente lo que está diciendo la gente, que no quiere la privatización del petróleo y en ese sentido nosotros nos vamos a movilizar.

P: ¿Pero también parece contundente lo que están diciendo los panistas de que van a con todo?
R: Nosotros nos estamos preparando para la movilización, en caso de que suceda esto que tú mencionas, que lo planteen de esa manera, no vamos a claudicar de ninguna manera en una lucha que para nosotros es vital para nuestro país.

P: ¿Decía López Obrador que ya se tienen muchas acciones, éstos mítines es lo más barato?
R: Es lo primero.

P: ¿Qué opinión tiene con relación a la reunión que tendrán las dirigencias del PRI, PAN y PRD en el Senado de la República, este miércoles, para ver precisamente la reforma energética?
R: El PRD está trabajando por su cuenta, pero lo importante aquí es que haya un acuerdo de que quien presente la iniciativa sea este grupo de expertos e intelectuales.

P: ¿No afecta ese tipo de reuniones a la movilización a la cual ustedes están convocando?
R: De ninguna manera.

P: ¿Andrés Manuel qué dice al respecto?
R: Que te conteste Andrés Manuel. Muchas gracias.

Leave a comment

Filed under Blogroll

Pedro Echeverría: Gobierno de Calderón y empresarios desesperados por la delincuencia y el petróleo

1. Al parecer, según el mismo gobierno ha reconocido, varias decenas de altos mandos y mandos medios del ejército mexicano se pasan, casi sin pensarlo, a las filas del narcotráfico. Mientras el ejército coloca sus mantas en los Zócalos de principales plazas del país invitando a la población a ingresar al ejército asegurando así a los campesinos y clases medias un trabajo y un salario ante el brutal desempleo que sufre la nación, en los campos de combate al narcotráfico aparecen otras mantas pero invitando a los miembros del ejército (ya bien entrenaditos y con armas) a ingresar a las filas del narcotráfico por un pago mayor. Con un discurso hueco el gobierno ilegítimo de Felipe Calderón está desesperado llamando al “patriotismo” y a la “unidad” sin darse cuenta de su enorme desventaja: el discurso del dinero, en las sociedades capitalista, es más importante que cualquier discurso moralista pronunciado por alguien conocido como inmoral y tramposo.

2. Basta con oír los discursos del presidente Calderón exigiendo “unidad patriótica” alrededor de su gobierno; ver al jefe panista Martínez insultando a López Obrador; escuchar a algunos empresarios exigiendo la privatización del petróleo y a los conductores y comentaristas de radio y TV acusando al gobierno de no poder someter por la fuerza a la llamada rebelión de la delincuencia ni a la oposición de izquierda; basta con ello para darse cuenta que la clase dominante está desesperada y sin saber qué hacer. Lo que parece vislumbrarse (al iniciarse ayer los debates en el legislativo) es que la reforma privatizadora ya no será aprobada porque la derecha no ha tenido argumentos para defenderla y que el narcotráfico tampoco podrá ser sometido porque muchos altos gobernantes y jefes del ejército están coludidos con los altos jefes del narco. Sólo había qué imaginar el brutal desprestigio de Calderón frente al gobierno yanqui.

3. ¿Quién puede olvidar que Calderón tuvo como primer acto de gobierno el anuncio del aumento en sus haberes e inversiones al ejército y (como escribió Granados Chapa) “de dos maneras le confió (al ejército) la función policíaca poniéndolo a la cabeza de la Operación Conjunta Michoacán, y transfiriendo miles de agentes de la Policía Militar a la Federal Preventiva, que reafirma así su condición de cuerpo castrense disfrazado pero identificable”. ¿Se acuerdan que la protesta presidencial del 1 de diciembre sólo fue posible por el enorme despliegue del Estado Mayor Presidencial, uniformados y vestidos de civil? Ese día inició Calderón su combate contra el narcotráfico ocupando con decenas de miles (tal vez cientos de miles) las ocupaciones militares a varios estados. Y a pesar de que como civil se vistió de militar y fue arropado por el ejército, parece que después de un año y medio, la batalla la está perdiendo y no sabe qué hacer.

4. Por otro lado, en los llamados “debates” sobre el petróleo, iniciados ayer martes 13 en la Cámara de Senadores los primeros ponentes: Cárdenas, Meyer, Ibarra, Pincheti, incluso la líder priísta Paredes, coincidieron en sus análisis y juicios en que el petróleo no podría privatizarse y que cualquier asomo en ese sentido debería reprobarse. Solamente el presidente del PAN y el investigador Elizondo defendieron el proyecto calderonista. La realidad es que después de aquella sesión que duró unas cinco horas y fue transmitida por el Canal del Congreso y en Internet, pudo verse que la derecha carecía de ponentes, de ideas y juicios para defender la privatización del petróleo y que han preferido escudarse en la frase de que “no quieren privatizar PEMEX y que sólo buscan atraer inversiones privadas. Algún ponente demostró que la derecha no estaba a la altura de defender su propia ideología privatizadora y que prefería negarla o esconderla.

5. Esos dos problemas (narcotráfico y privatización del petróleo) son los que no dejan dormir al señor Calderón porque de ellos dependen otros asuntos graves; pero además hay otros más directos que al parecer están cubiertos (a propósito) por gruesos mantos de humo: crecimiento del desempleo, desconfianza de inversionistas, aumento de movilizaciones de protesta, total desatención de los servicios de salud y educación, crecimiento de la corrupción y encubrimiento de los pillajes del expresidente Fox y sus familiares. A punto de cumplir año y medio de gobierno, Felipe Calderón sigue sin realizar acción alguna en beneficio de la población. Lo que se recuerda de esos 18 meses es represión contra la lucha de Oaxaca y encarcelamiento de miembros de la APPO; haber sacado al ejército para ocupar varias entidades del país, haber reprimido y encarcelado a los campesinos de Atenco y firmado el Plan México con Bush.

6. A punto de transcurrir la cuarta parte de su sexenio, Calderón ha sido “un cero a la izquierda”, y no parece que pueda gobernar. Sabía él que si no aceptaba “que se limpiara la elección mediante un nuevo conteo de los votos” iba a ser un gobierno ilegítimo y, por tanto, tendría una oposición permanente. No le importó, más aún se burló de quienes así le reclamaban. Hoy Calderón no tiene ninguna autoridad moral para llamar a la unidad ante los problemas del país. Si el PRI ha aceptado no es por “patriotismo”, al contrario: es porque su oportunismo permanente por negociar cargos y poder lo tienen cogobernando, tal como lo hizo con Fox. Ante esa realidad de falta de apoyo, Calderón ha acudido desesperadamente, de manera suplicante, al gobierno yanqui para que el congreso apruebe la llamada “Iniciativa Mérida” y se comiencen a entregar los millones de dólares ofrecidos para la compra de armamentos, helicópteros y contrato de más militares.

7. Pero también la coyuntura yanqui le es desfavorable a Calderón. Los EEUU atraviesan en este momento por una situación económica difícil por la competencia internacional en la que China y algunos otros países torpedean sus productos en el mercado. Por otro lado Bush sufre desesperado por el desplazamiento que tiene su partido, el Republicano, ante el inminente triunfo del partido Demócrata con Obama a la cabeza. A pesar de los esfuerzos de Calderón porque se aprueben los miles de millones de dólares de la “Iniciativa Mérida”, parece que pueden pasar a la incubadora, hasta en tanto se define la sucesión presidencial. Sin embargo el Bush hará “hasta lo imposible” para asegurar un control más estricto de la zona, particularmente de su frontera sur. Consolidar “ayudas militares” a México, Colombia y Perú es esencial en estos momentos en que una serie de países como Venezuela, Bolivia, Ecuador, buscan consolidar su independencia y soberanía.

8. Se espera que los movimientos de trabajadores, de ciudadanos y de izquierda crezcan a partir de esta coyuntura en que el gobierno de Calderón está demostrando una enorme incapacidad para solucionar problemas. Más aún, en caso de no aprobarse la privatización petrolera los mismos empresarios y los inversionistas yanquis podrían hacer a Calderón a un lado por no garantizarles los negocios prometidos. El lopezobradorismo sigue siendo una gran esperanza movilizadora; los profesores y la APPO oaxaqueños reaparecerán mañana (día del Maestro) con más fuerza; como cada año el movimiento magisterial de la CNTE sacude con sus manifestaciones la Ciudad de México y otras capitales del país; los electricistas del SME y otros sectores ligados a él han estado movilizados contra la privatización de los energéticos. Sólo falta la estrategia “mágica” que ayude a que esas organizaciones se pongan de acuerdo para conjuntar fuerzas.

* Argenpress
* http://www.argenpress.info/nota.asp?num=055058&Parte=0

Leave a comment

Filed under Blogroll

Gerardo Fernández Casanova: El debate, 20 años tarde

Si desnudamos de adjetivos y accidentes el conflicto que, en torno al petróleo, enfrenta hoy a la sociedad mexicana, vamos a encontrar que se trata de una confrontación de modelos económicos, que en buena medida incluyen visiones diferentes de país. Este tema debió haber sido ampliamente discutido desde 1988 cuando, por la vía del fraude electoral, Carlos Salinas de Gortari optó, de manera autoritaria y sin consulta, por insertar al país en el proceso de globalización impuesto por el Consenso de Washington. En efecto, puede decirse que a los mexicanos nos pasó de noche el cambio más profundo que se ha registrado en la historia del país. Con bombo y platillo y en cadena nacional, Salinas anunció la reestructuración de la deuda externa, dando a entender que era el producto de una negociación inteligente y patriótica, cuyo resultado sería la inserción de México en el primer mundo. Y la mayoría se tragó el anzuelo; la entonces reciente desaparición de la Unión Soviética y el fracaso del llamado socialismo real, colocaron a la izquierda mexicana en condición de adolescencia. Sólo el alzamiento zapatista del 1 de enero de 1994 manifestó el rechazo al neoliberalismo y la globalización, los que quedaron inmersos en el conjunto de reivindicaciones indígenas.

Nunca fuimos informados respecto de los compromisos que se signaron con el FMI y el BM. No hubo tal negociación, ni mucho menos inteligente y patriótica. Se trató simplemente de un convenio entre dos partes ligadas por la misma convicción ideológica y en la misma conveniencia de negocios personales. No fue de balde la imposición fraudulenta de Salinas, un anglopensante nacido en México. Así procedió la privatización de la banca, la de las telecomunicaciones, la de la televisión pública, la agraria, entre otras, para culminar con la firma del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica. Se fraguó el contubernio entre el PRI y el PAN, con el beneplácito del segundo que manifestó que el partido del gobierno había adoptado los principios panistas. Zedillo continuó con el desmantelamiento del estado y la entrega del país a los intereses del gran capital internacional: el rescate bancario del FOBAPROA, el más grande atraco a la Nación, seguido por la entrega de los ferrocarriles, el cierre de la CONASUPO y la entrega del mercado de alimentos a las transnacionales, los PIDIREGAS como fórmula encubierta para extranjerizar la ingeniería y la construcción de instalaciones para PEMEX y CFE. Para rematar con Fox y sus contratos de servicios múltiples para enajenar la explotación de gas natural en la Cuenca de Burgos o los permisos de generación de electricidad a los consorcios internacionales.

No obstante, esta caterva de vendepatrias fracasó en diversos intentos de llevar al nivel de ley la privatización de la actividad petrolera; no se atrevió a tocar la fibra nacionalista y prefirió manejarse con bajo perfil en la materia y, tramposamente, aplicar subterfugios para ir minando la operación estatal, entre otras formas por el criminal drenaje de los recursos financieros de la empresa y la dilapidación de los excedentes petroleros; por la liquidación o jubilación anticipada del personal técnico; por el abandono del esfuerzo tecnológico del Instituto Mexicano del Petróleo y, en general, por la definición de la empresa como proveedor de crudo al mercado gringo.

Hoy, una vez que lograron colocar a la empresa en condición de quiebra técnica, formulan su iniciativa privatizadora envuelta en la engañosa presentación como para salvar a PEMEX, haciendo énfasis mendaz en el fortalecimiento de la empresa de todos los mexicanos, con la pretensión de engañar a la opinión pública a base de propaganda televisiva y mediante la compra de talentos y plumas a su servicio. No es remoto suponer que, dada la magnitud del negocio en ciernes, pueda haber un grupo de legisladores propensos a vender su voto; mil millones de pesos alcanzan para cien diputados o senadores de a diez millones por cabeza, más barato que la campaña de medios y suficiente para asegurar la aprobación de las iniciativas.

Sin embargo, la derecha vuelve a equivocar su diagnóstico. Aún con todos los embates con que se ha pretendido cancelar la vena nacionalista del pueblo de México, esta subsiste y se fortalece en la medida en que mayor es el peligro para los intereses de la Nación. El Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo, convocado por Andrés Manuel López Obrador, crece y ofrece una resistencia eficaz contra los intentos de entregar la riqueza nacional a la iniciativa privada nacional y extranjera; cada vez son más las voces independientes que se manifiestan contra la privatización y de ello da cuenta el debate que se inició en la Cámara de Senadores, así como los que se registran a lo largo y lo ancho del país en universidades y centros de opinión, hasta en las familias.

Va quedando claro al régimen que, aún con el ejército en las calles, la movilización popular no va a parar hasta conjurar el peligro de la pérdida de la Nación en manos de unos cuantos privilegiados. No pasarán.

* Argenpress
* http://www.argenpress.info/nota.asp?num=055057&Parte=0

Leave a comment

Filed under Blogroll

Gerardo Fernández Casanova: ¿Borrar la historia?

Una de las características aberrantes de la tecnocracia en el poder, es su pretensión de borrar la historia o, en último término, de enmendarla. Es también una de las razones por las que llevamos un cuarto de siglo dando palos de ciego, aplicando recetarios que nada tienen que ver con la realidad, los que solamente han servido para ahondar la zanja que marca la diferencia entre lo que somos y lo que anhelamos ser. El tecnócrata, sea en México o en la Conchinchina, al no encontrar asideras para sustentar sus recetarios, simplemente los trata de imponer como dogmas. Es un dogma, por ejemplo, el concepto de que el libre juego de las fuerzas del mercado es el único antídoto contra la pobreza; como también es dogmática la determinación de la necesidad de crear el mercado energético, eliminando la intervención del estado; por sólo mencionar ejemplos. No de otra manera se puede entender la falta de interés de la tecnocracia para debatir sobre sus postulados; se asumen dueños de la verdad y califican de ignorantes a quienes se les oponen.

El caso del campo mexicano es emblemático del afán antihistórico cuyo resultado, a todas luces, ha sido su crisis ya crónica. Dicho afán se manifiesta en dos vertientes, ambas igualmente erróneas: la más socorrida por los modernistas se refiere al aprovechamiento “eficaz” de las ventajas comparativas, según el cual si resulta más barato producir maíz y granos básicos en los Estados Unidos, habrá que importarlo en beneficio de la población consumidora y, a cambio, exportar bienes para los que se cuente con mayor ventaja en su producción local, como sería el caso de las frutas, las flores y las hortalizas de invierno. Lo que en la teoría suena lógico choca con la terquedad práctica: esas frutas, flores y hortalizas de invierno no pueden satisfacer la necesidad de alimentación de los mexicanos, la que, entonces, queda a merced de las veleidades o intencionalidades del oferente extranjero. El caso es claro en el presente: un movimiento de la demanda de maíz estadounidense hacia la producción de combustibles, prov
oca un alza desmedida en el precio del principal alimento de la población, para la que el mercado no ofrece una alternativa compensatoria. El resultado se llama hambre para un amplio sector de la sociedad. En la historia de todos los pueblos, desde la Biblia hasta el Popol Vuh, la seguridad alimentaria ha sido el condicionante de su desarrollo. La alimentaria es elemento sustancial de la soberanía de las naciones.

La otra vertiente, igual de errónea, considera que el objetivo nacional debe ser alcanzar la competitividad en la producción doméstica de granos para igualarla a la de Norteamérica, lo que implica crear aquí las mismas condiciones que allá se registran. Por principio de cuentas, la naturaleza se obstina en no querer modificarse, por ejemplo, para que aquí dispongamos de las enormes superficies planas y del clima que las hace fecundas; la nieve de invierno que elimina plagas y humedece la tierra es un factor inimitable. A lo anterior habrá que agregar los factores social y cultural: la conquista española conservó a la población autóctona para explotar su mano de obra, en tanto que la colonización anglosajona la eliminó para explotar directamente la tierra (con excepción del sur esclavista). Esto marca una diferencia abismal entre ambas culturas que se refleja en la presión sobre la tenencia de la tierra que, en México fue causa de una revolución y una profunda reforma agraria. El intento de ignorar la historia llevó a Salinas de Gortari a postular la contrarreforma agraria en 1992 y a la pretensión de descampesinizar el campo, proyecto que, además de fracasar, ha sido un verdadero genocidio. En la mayor parte del territorio nacional se vive en condiciones de miseria, para la que las únicas alternativas son la siembra de estupefacientes o la emigración con sus secuelas de muerte.

Igualmente se intenta borrar la historia en la materia del petróleo y, en general, de la energía. El porfiriato y sus “científicos” precursores de los actuales tecnócratas, fincó su proyecto de país en la entrega de los recursos naturales a la explotación por particulares, principalmente extranjeros. La Independencia y la Reforma dejaron intacta la forma de explotación de los recursos, por la que los mexicanos sólo observaban como la riqueza del país fluía a las metrópolis dejando sólo miseria en esta tierra, pero además sometiendo la soberanía a los caprichos de los empresarios mineros y petroleros, lo cual constituyó el otro causal del movimiento revolucionario de 1910, que derivó en la Constitución de 1917 y sus disposiciones de preservación de los recursos naturales para ser propiedad de la nación y su aprovechamiento en beneficio del pueblo. Costó mucha sangre lograr tales conquistas mínimamemente soberanas. Hoy se pretende, sin argumento real que lo respalde, devolver a los extranjeros lo que con tanto esfuerzo se recuperó.

También fue motivo de la lucha revolucionaria de principios del siglo XX, la conquista de condiciones humanas en el trabajo. Las huelgas de Cananea y de Río Blanco y la represión autoritaria porfirista alimentaron al descontento que luego estallaría. No fue gratuita la incorporación del derecho social al trabajo digno al texto constitucional; también costó sangre de mexicanos. La semana pasada se repitió la historia. El régimen neoporfirista y fraudulento arrasó con el derecho de huelga en la misma mina de Cananea, en repetición centenaria de aquel preludio de la guerra. Ni por ese prurito se abstuvieron. Tampoco los que, a la manera de Porfirio Díaz, se hicieron del poder por la vía del fraude electoral, repitiendo la historia.

No soy de los que ven la historia como una sucesión de ciclos en los que las fechas y los acontecimientos se repiten, pero la terquedad de los tecnócratas neoliberales parece empeñada en provocar un 2010 sangriento, para cumplir con la celebración centenaria.

Antes de que la sangre corra, los mexicanos seguimos apostando a la movilización pacífica. En las próximas semanas seremos testigos de los atentados contra la soberanía energética y contra las conquistas en materia laboral. La convocatoria de Andrés Manuel de no permitirlas va en serio. Paradójicamente, la movilización tendrá que convertirse en paro nacional. No hay de otra.

* Argenpress
* http://www.argenpress.info/nota.asp?num=051122&Parte=0

Leave a comment

Filed under Blogroll, Columns, Essay, Politics, Resistance